De acuerdo con datos de Equifax, buró de crédito en Ecuador, hasta abril de este año se realizaron 1´028.960 operaciones crediticias en los bancos y cooperativas del sistema privado del país. Esta cantidad de otorgamientos beneficiaron a aproximadamente 929 mil personas.
Asimismo, el análisis de datos realizado por el equipo de Operaciones de la firma muestra las edades de las personas que accedieron a un crédito: el 34% del total de beneficiarias, algo más de 319 mil, tienen entre 35 y 49 años. El 28%; es decir, unos 262 mil, entre 25 a 34 años; más de 178 mil, el 19%, tienen edades entre los 50 a 64 años. Los mayores a 65 años, corresponden al 5%, con cerca de 48 mil personas; y finalmente, otro 5% corresponde a unas 46 mil personas entre los 18 y 24 años. Adicional a esto, aproximadamente 75 mil personas (8%) no reportaron sus edades.
Con relación al tipo de crédito, el más apetecido fue el de consumo con aproximadamente 446 mil concesiones (43% del total de créditos concedidos), le sigue el microcrédito con más de 435 mil operaciones (42%), después el comercial con cerca de 140 mil (13%); y, finalmente, el hipotecario con más de 6.600 colocaciones (0,6%). Cabe resaltar que, en el caso del crédito para la compra de una vivienda se reportan exclusivamente las operaciones del sistema bancario privado, sin contar con aquellas que corresponde al Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (Biess).
Verónica Rodríguez, gerente de Operaciones de Equifax, menciona que en lo que va del 2021, marzo fue el mes que más ha registrado créditos, con un total de 300.829 operaciones. En tanto, en enero más de 244 mil créditos fueron concedidos, en febrero unos 245 mil y en abril, 238 mil aproximadamente.
A propósito de la publicación de estos datos, Rodríguez explica que para llegar al análisis se utilizan las operaciones reportadas por las Superintendencias de Bancos y de la Economía Popular y Solidaria; pero, que si bien, el rol del buró de crédito es el de la recopilación de la información y otorgar las herramientas para el análisis por parte de los otorgantes de crédito, la decisión de la concesión es de las entidades financieras, las mismas que lo hacen de acuerdo con sus propias políticas. “El buró no aprueba ni niega los créditos” puntualiza la ejecutiva.
Durante los cuatro primeros meses de 2021, se realizaron más de 10 millones de consultas de información crediticia. Si bien una consulta no representa necesariamente que a una persona haya se le haya concedido un préstamo, sino que se ha visto su perfil crediticio, existe una correlación entre las consultas al sistema de información de riesgo crediticio y los créditos otorgados por el sistema y el acceso a bienes o servicios por parte de la población. Por ejemplo, en una casa comercial una persona puede ser consultada para saber si podría aplicar a una compra a crédito.
Asimismo, un banco, a pedido de su cliente, puede revisar su información y con base a ello, realizar una variedad de ofertas de servicios financieros que le permitan tomar la mejor decisión. En consecuencia, las consultas a la información crediticia están relacionadas con el otorgamiento de créditos, así como el acceso a diversos bienes y servicios por la población en general. En otro aspecto y con relación a los usuarios de tarjetas de crédito, de acuerdo con los datos de Equifax se calcula que hasta abril de este año se registraron 2´421.853 tarjetahabientes. De ellos, más de 222 mil corresponden a personas que obtuvieron una nueva tarjeta de crédito entre los cuatro primeros meses de 2021.
Asimismo, se calcula que, entre enero a abril, 1,2 millones de personas poseían 1 tarjeta de crédito; mientras que, unos 570 mil tarjetahabientes manejan 2 tarjetas y 3 tarjetas de crédito son administradas por unas 293 mil personas; en tanto, 316 mil usuarios manejan 4 o más de estos medios de pago. Con estas cifras de por medio, la experta de Equifax enfatiza en la necesidad de seguir creando una cultura de salud financiera en los usuarios de modo que, el destino de sus créditos sirva para efectivamente desarrollar su mejor capacidad financiera. Para ello, Rodríguez ofrece una serie de recomendaciones para lograr este objetivo.